Estimados redactores del Proyecto de Nueva Ley Electoral:
Télam informó que ya se ha iniciado el trámite para adquirir 125.000 máquinas para votar. Muy sospechoso, porque el Congreso aún no comenzó a tratar este asunto (ni siquiera le llegó el Proyecto del Poder Ejecutivo), y por otro lado se parece mucho a lo que queríamos cambiar porque es muy propenso para la coima y el fraude. Me dirán: «Kristina sí, pero Macri no haría eso». Concuerdo, pero… ¿y después de Macri, qué? ¿Y si en el entorno de Macri hay algún traidor que lo induce a firmar un decreto que encierra coima y fraude, como algunos de los más allegados a Irigoyen le daban a leer diarios falsos?
Pero confío en que vuestro proyecto de voto electrónico será innovador y creativo como pidió nuestro Presidente Mauricio Macri en su discurso inaugural de una nueva era, y no un catálogo de perogrulladas como esos proyectos que autorizan al Poder Ejecutivo para que alquile el servicio electoral que le venga en gana siempre que cumpla los trillados requisitos que cualquier sistema cumple: que sea fácil de usar, difícil de hackear, que no vulnere el secreto del voto, etc. Los conozco bien porque Patricia Bullrich me hizo llegar los textos de 16 proyectos de ese tipo (hace ya varios años, pero esa errónea idea aún perdura).
Si para lograr consenso la nueva ley debe facultar al Poder Ejecutivo para que opte por un sistema que cumpla determinados requisitos, lo lógico sería que esos requisitos no sean las perogrulladas de siempre sino que apunten a cumplir elementales principios republicanos (división de poderes, transparencia, no abrumar al pueblo con impuestos). Por ejemplo, podrían ser algo así como los siguientes:
1 – Los programas para votar y para sumar los resultados de todas las mesas de cualquier jurisdicción deben ser propiedad del Estado y deben ser operados por personal del Estado conocido y no designado al azar.
2 – Ambos programas deben ser tan sencillos que pueda instalarlos y controlarlos cualquier persona que tenga nivel de escolaridad secundario, y que pueda votar cualquier persona de menor nivel.
3 – Ambos programas no deben requerir máquinas especiales, sino que deben poder usarse en las computadoras comunes que ya están en todos los juzgados y en todas las escuelas.
4 – Los Presidentes de Mesa y Suplentes serán personal de cada escuela, designardo por su Director, quien además será responsable de instruirlos y también de instruir a los vecinos y a los alumnos del último curso secundario, quienes deberán egresar capacitados como presidentes de mesa.
5 – La Justicia Electoral podrá designar los Delegados temporarios que sean necesarios para cumplir las tareas propias de cada elección.
6 – Las listas de candidatos aprobadas por la Justicia Electoral serán puestas en lnternet y de allí las tomarán los Presidentes de Mesa y las Autoridades de cada Lugar de Votación.
7 – Los resultados de cada mesa se transmitirán por correo electrónico, o a la mano en unidades de memoria tipo pendrive o CD, al ente que debe sumarlos.
8 – El ente que debe sumarlos será la Cámara Nacional Electoral, que deberá publicar en Internet los resultados de cada mesa y de cada jurisdiccíón. «
Otro tema relacionado con el voto electrónico
El lunes 28 de marzo el diario «El Día» de La Plata informó que la Gobernadora Ma Eugenia Vidal decidió no usar voto electrónico en las elecciones 2017 porque la cantidad de partidos en la provincia es tan grande que resultaría complicadísimo y confundiría a los electores. Eso es cierto si sólo se piensa en sistemas como el MSAusado en la CABA (mal llamado «BUE»), pero habría que decirle a la Gobernadora que con el Sistema VEGyS «SÍ, SE PUEDE». Lamentablemente no tengo llagada a ella, espero que algún destinatario de este mensaje se lo diga.
Orlando Enrique Bolognani – www.votoelectronico-gys.com.ar
PD: Frase del histórico discurso de nuestro Presidente Mauricio Macri, el 10-dic-2015:
“Hace falta osadía de ideas, osadía de invención y atrevimiento de proyectos nuevos y distintos, quiero ser el presidente de la creatividad y la innovación”. «Nuestra forma de votar no puede seguir pensándose y gestionándose con ideas viejas»