Los 50 años de la Universidad de Belgrano
La Universidad de Belgrano cumple medio siglo de vida. Fue creada por el doctor Avelino Porto el 11 de septiembre de 1964 y es una de las universidades privadas de mayor trayectoria en la Argentina y la primera fundada sin dependencia de instituciones religiosas o empresarias.
Su primera sede se encontraba en una casona de Sucre y Cramer. Inició sus actividades con 90 estudiantes, 28 profesores y un empleado. El 26 de enero de 1970 obtuvo la autorización definitiva para funcionar. Hoy tiene varias sedes. La central es la imponente Torre Universitaria de Zabala 1837.
Su estructura inicial fue organizada en cuatro facultades: Derecho y Ciencias Sociales, Humanidades, Ciencias Económicas y Arquitectura. Actualmente, la Universidad de Belgrano cuenta con las Facultades de Arquitectura y Urbanismo, Derecho y Ciencias Sociales, Ciencias Económicas, Humanidades, Ingeniería, Tecnología Informática, Ciencias Agrarias, Lenguas y Estudios Extranjeros, Ciencias de la Salud, Ciencias Exactas y Naturales, y Estudios a Distancia; y cuatro unidades académicas de posgrado: Facultad de Estudios para Graduados, Escuela de Posgrado en Negocios, Escuela de Posgrado en Derecho y Departamento de Estudios de Posgrado y Educación Continua.
Las estadísticas dan cuenta del camino recorrido: hoy la Universidad de Belgrano mantiene 142 convenios de intercambio internacional, lleva suscriptos 400 acuerdos con empresas, tiene 78 convenios de doble diploma con importantes universidades del mundo y alberga a tres mil alumnos llegados de diversos países.
La Universidad es una de las 12 preferidas por los estadounidenses para estudiar en el extranjero. Así lo sostiene un artículo publicado por el sitio online BuzzFeed. En esa nota, la UB aparece en el séptimo lugar recomendado para realizar estudios de un semestre o un año. Es la única universidad argentina de la lista y sólo hay otra latinoamericana: la Universidad Veritas, de San José de Costa Rica, en el puesto número once. Además, entre las 300 instituciones educativas de América Latina medidas por la empresa británica Quacquarelli Symonds la UB estaba en la ubicación 112 en el ranking de 2012. Ganó 28 puestos en 2013, pasando al número 84, y otros 22 en 2014, llegando a la posición 62.
La noche del medio siglo
Brillante y emotiva fue la conmemoración del medio siglo de la Universidad de Belgrano.
Recuerdos del ayer y las mejores expectativas para el futuro se conjugaron en un extenso festejo, que será inolvidable. La noche empezó con la presentación de una placa en el acceso de la Torre Universitaria y con la constitución de una cápsula del tiempo, para ser abierta dentro de 50 años. Incluye monedas y billetes de curso legal, ejemplares de los diarios La Nación y Clarín y los últimos números de las revistas para alumnos (UB News) y profesores (Mundo UB) de la Universidad.
Desde Roma, Su Santidad Francisco envió su bendición y su saludo fraternal. Al anunciarlo, el director de la Librería Universitaria, Ignacio Tomé, recordó el paso del cardenal Bergoglio por la UB pocos meses antes de ser ungido Papa.
Además de los directivos, autoridades, profesores y empleados de la Universidad, tuvimos la presencia de destacados invitados, entre ellos el ministro de Educación de la Nación, Alberto Sileoni; el presidente de la Unión Industrial Argentina, Héctor Méndez, y el presidente del Consejo de Administración de la Universidad Argentina de la Empresa, Héctor Masoero. También se solidarizó con el aniversario, mediante una nota, el ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, Lino Barañao.
Cuatro representantes de diversas confesiones destacaron la apertura y el diálogo interreligioso que fomenta desde siempre la Universidad de Belgrano. Fueron ellos el rabino de la comunidad Benei Tikva, Abraham Skorka; el licenciado Issam Sibai, del Centro Comunitario Islámico Salam; el doctor Marcelo Figueroa, líder evangélico que fue durante 25 años director de la Sociedad Bíblica Argentina, y Guillermo Marcó, director de la Pastoral Universitaria del Arzobispado de Buenos Aires. El desfile de autoridades, ex alumnos y personalidades continuó más adelante en el auditorio Presidente Sarmiento. Como su capacidad se colmó desde temprano, fueron instalados diversos sectores de plateas en los subsuelos y la planta baja, con televisación directa de las alternativas.
En su discurso, el ministro Sileoni dijo: “Soy uno de los 50.000 orgullosos egresados de la UB, y vengo en representación del gobierno nacional”. Añadió que “esta universidad está llena de buenos maestros, y siempre estuvo al servicio de la libertad y del pensamiento”. El escenario del auditorio se transformó en un living en el que dialogaron con el rector, Avelino Porto, diversos grupos de personas ligadas con la institución. Inauguraron la ronda los padres fundadores de la Universidad: el doctor Porto, los vicerrectores, Aldo J. Pérez y Eustaquio Castro; la arquitecta Mabel Fernández y el profesor José Luis Ghioldi.
Se mostraron videos especialmente preparados para mostrar el curso de las décadas y las diversas incidencias históricas y culturales del medio siglo transcurrido, desde la presidencia de Arturo Illia hasta la aparición de la historieta Mafalda, la terrible década del 70, el regreso de la democracia y la inauguración de la Torre.
Hubo muchas anécdotas y recuerdos personales cálidos y humorísticos, sintetizados en esta frase de Héctor Mendez al doctor Porto: “Recuerdo que nos conocimos en el Liceo Militar, que usted era cadete mío y que me tenía zumbando”. Risas y abrazos fueron la constante de toda la noche.
Porto recordó el largo camino recorrido desde aquella noche de 1964 en que, después de haber recibido la oferta de dirigir una universidad con tan solo 28 años de edad, estacionó su Renault Gordini rojo en una esquina y estalló en llanto. “Pero ésta no es una noche para cosas tristes. Esta noche debe imperar la alegría”, dijo a continuación. Y esa alegría fue la tónica que desembocó, varias horas después, en el brindis, la conversación de sobremesa, la música y el baile.